ALTO AL HUAQUEO

PROTEJAMOS NUESTRO PATRIMONIO CULTURAL

Desde la llegada de los Españoles en 1532, las pirámides y cementerios de nuestros antepasados fueron saqueados y destruidos con el afán de apropiarse de los objetos de oro contenidos en aquellos lugares, considerados como sagrados por los antiguos peruanos. Como conquistadores se sentían con el “derecho” de apoderarse de las riquezas que pertenecía a un pueblo sojuzgado.

Estas actividades de extracción constituyeron un capítulo nefasto de nuestra historia. Por desgracia esta actividad ilegal y destructiva aún continúa hasta nuestros días y es conocida como “Huaqueo”.

Los antiguos peruanos utilizaban la palabra “Huaca” para designar a todo lugar que era considerado sagrado, por eso es que hasta la actualidad denominamos como Huacas a los diferentes monumentos arqueológico. El uso tradicional y cotidiano de este término ha provocado que sean denominados como “Huaqueros “ los individuos que profanan los sitios arqueológicos, con el fin de apropiarse de metales, ceramios y textiles con fines de lucro. Estos individuos abastecen los mercados de coleccionistas y traficantes de arte precolombino en América y Europa, produciendo que nuestra riqueza arqueológica salga para siempre del país

Sin embrago, esta actividad no sólo es deplorable por estar contra la ley, si no porque, destruye los monumentos arqueológicos y nos despoja de nuestra rica herencia cultural. Estos restos arqueológicos son fruto de la destreza de nuestros antepasados y por lo tanto nos pertenecen como descendientes. Además estos monumentos y sus objetos deben ser investigados con el fin de reconstruir nuestra historia prehispánica y fortalecer nuestra identidad cultural. Así mismo, su protección, investigación y conservación permitirá poner a muchos de ellos a disposición del turismo cultural, y es de esta manera beneficiar a la comunidad local que se sentiría orgulloso de su pasado. Un pueblo sin pasado es u pueblo sin futuro y  una nación que honra  a su pasado  se honra a sí misma.

MARCO LEGAL VIGENTE

El Patrimonio Cultural de la Nación está formado por todos los bienes que son testimonios de creación humana, material, e inmaterial, reconocidos por su importancia artística, científica o técnica; esto incluye a los bienes arqueológicos. Por ello el Patrimonio Arqueológico los constituyen las huacas, montículos, tumbas, objetos de cerámica, textiles, metalurgia, es decir, todos los restos de actividad humana.

1.- El Artículo 21 de la Constitución Política del Perú, establece que los yacimientos y restos arqueológicos, construcciones, monumentos, objetos artísticos y testimonios de valor histórico, son considerados Patrimonio Cultural de la Nación, y están bajo amparo del Estado.

2.- La ley Nº 28296, establece que el Patrimonio Cultural de la Nación está bajo el amparo del estado y de la comunidad nacional, cuyos miembros están en la obligación de cooperar con su conservación.

3.- El Decreto Supremo Nº 16-85-ED; declara que son intangibles, inalienables e imprescriptibles los bienes, muebles e inmuebles de la época prehispánica, pertenecientes al Patrimonio Cultural de la Nación. La protección de los sitios arqueológicos comprende el suelo y el subsuelo en que se asientan, los aires, y el marco circundante en la extensión técnica para cada caso.

4.- El título VIII del código penal, en los delitos contra el Patrimonio Cultural en sus artículos 226º al  231º del código penal sanciona con cuatro a ocho años de pena privativa de la libertad a quienes atenten contra el Patrimonio Cultural de la Nación.

5.- El Perú como nación integrada al contexto mundial es suscriptor de acuerdos y convenciones internacionales que tratan sobre la protección, defensa y conservación de Patrimonio Cultural de carácter arqueológico e histórico. (Venecia 1964,UNESCO 1972,San Salvador 1976, entre otros).